Como todos los años, el primer fin de semana de agosto, se desarrollará la Colecta Diocesana Anual Ñemuasâi del 1%. En parroquias, capillas e instituciones educativas se podrá colaborar. Durante todo el mes se podrán hacer aportes. El lema que ilumina esta edición de la campaña es: “Haga todo lo que Él les diga” (Jn. 2,5).

La Colecta propone a los fieles donar el 1% de los ingresos mensuales, como expresión de comunión y solidaridad con la obra evangelizadora de la Iglesia, por única vez en el año.
Por ejemplo: si alguien percibe mensualmente $2.000 entonces, su ofrenda mensual del 1 %, debería ser de $20, es decir, $5 por misa semanal. Si gana
$3.500, el 1% sería $35 por mes y $ 8,75 por misa semanal.

Otras alternativas para las personas que no tienen ingresos mensuales podrían ser:
*Dar sumas concretas de dinero (Por ejemplo: $2, $5) por colecta, por
mes.
*Donar lo equivalente a bienes de consumo cotidiano. Por ejemplo, alguien
podría querer dar el equivalente a una golosina por día o un kilo de pan, etc. Entonces si la golosina cuesta $1, la ofrenda de la semana tendría que ser alrededor de $5.
*Invitar a guardar los vueltos pequeños y donarlos el fin se semana.

La finalidad de la colecta quiere priorizar la formación de los agentes pastoral mediante talleres, cursos, seminarios, etc. Traslado y movilidad de los agentes pastorales. Viáticos y estadía. También, ayudar a cubrir los gastos de los eventos diocesanos: celebraciones, como por ejemplo: Semana Santa, Corpus Christi, Navidad, peregrinaciones, encuentro del pueblo de Dios, presentación de documentos eclesiales, formación de catequistas y de secretarios parroquiales, etc.

Los aportes recibidos, se distribuyen de la siguiente manera, el 30% de lo recaudado conserva la parroquia, con preferencia para la formación de sus agentes de pastoral. El 70% restante se envía al arzobispado, de donde una mitas se destinará a la formación de agentes de pastoral, y la otra mita se utilizará para cubrir los gastos de los eventos diocesanos.

Extender, propagar, esparcir…

Ñemuasâi. La palabra en guaraní, nos identifica no solo como provincia sino como región; siendo expresión de nuestras profundas raíces cultural-religiosa, en el que la comunión, es un valor vivido en el cotidiano compartir de los miembros de la comunidad.

“Ñemuasâi” es una hermosa palabra que significa extender, propagar, esparcir la semilla, como lo hace el sembrador. Es una palabra que invita a la esperanza de vida que llevan las semillas esparcida en la tierra.

Al colocarle ese nombre a esta nueva colecta, quisiéramos esparcir la semilla del compartir en el corazón de los fieles, esperando una respuesta generosa, que corresponda a los dones y talentos que Dios esparce en sus fieles para que redunde luego en bien de todos.